por JOAO GRAMA
Sagres y Vila do Bispo son pueblos situados en la esquina suroeste de Portugal y de Europa continental. En ellos vive una pequeña comunidad de pescadores dedicados a la captura de percebes, conocida por ser una de las últimas dedicadas a este raro manjar y activa durante casi tres generaciones – aunque existen registros arqueológicos que indican su presencia en la cultura local desde hace siglos.
La costa está compuesta principalmente por rocas y acantilados, en algunos casos con más de 100 metros de altura. Y el de estos pescadores es un trabajo muy difícil y arriesgado que requiere de ellos una gran dosis de coraje, además del conocimiento y el uso de cuerdas que son una de sus herramientas de trabajo más importantes. Utilizan las cuerdas para bajar, moverse entre las rocas y faenar en la zona de rompientes peligrosas –hábitat natural de los percebes. El intrigante escenario de cuerdas y estructuras que componen para sus labores es lo que me decidió a iniciar esta investigación.
Las cuerdas y la actividad humana que sugieren, evocan para mí no sólo los tiempos prehistóricos de su invención sino otros trabajos que son comunes en los barcos de pesca y en la agricultura; de donde, curiosamente, salió la adaptación del instrumento con el que los percebes se apresan. Unas y otras referencias aluden de inmediato a una cierta idea de lo más elemental y precario.
Me parece muy interesante que en el siglo 21, la era de la investigación científica, de tecnologías avanzadas y herramientas complejas, estos hombres sean capaces de realizar su trabajo, arriba y abajo de los acantilados, recurriendo sólo al uso de una cuerda; sin dejar apenas otra huella (además de las de sus botas y de las ruedas de sus coches). Eso añade sutileza a esta relación, que no necesitó grandes intervenciones, sino únicamente del empleo de un elemento tan primario y tan intuitivo para que pueda mostrarse como un ejemplo de adaptación a la naturaleza.
En esta serie de imágenes me interesa, en primer lugar, mostrar las señales de esa relación tan elemental entre el hombre y el medio físico que lo rodea. Pero este es también un proyecto que plantea interrogantes sobre el territorio y el lugar; sobre un lugar específico, pero también acerca de la percepción (y sus mecanismos), y sobre la idea de la fotografía como representación del mundo.