José Antonio Zambrano

Fundación Ortega MuñozPoesía, SO6

Image

DOROTHEA VON ELBE
Sin título, 2016

José Antonio Zambrano

POEMAS

aGUas DE OtOÑO

Es un cariño más.
Ha llovido,
y en la humedad de los ojos
hay un refugio extraño
que no orea la noche.

Quizá
           de este decir quede
una gota más fiel.
Un renglón que sostenga
lo que dejan las manos
al no poner nada en otro sitio,
y sin saber que esto
fue al cabo de los años
una estable manía.

Casi Una nOrMa

Si no me voy no vuelvo.
Y si me voy
tal vez pueda buscar el camino de vuelta.

Y si acaso no vuelvo,
si no logro encontrar el camino perdido
será porque mi voz
contó el rubor de las palabras,
al no saber
que respirar un verso es como una sonrisa.

No es locura del hielo
que se convierta en agua entre mis manos.
Que culpe a la fijeza del destino
de ese no que es la vida,
y al fin
              lo casual que abruma el desamor,
cuando la edad presiente
que olvidar un presagio es no tener memoria.

HistOria

Un poema se hace
con palabras lentas.

Protegidas por el balbuceo
de una gota de agua sobre el mar.

Hundidas en el refugio
de una rara decencia.

Amparadas por los espejos
que guardan lo que ven.

Ansiadas por el vicio
de dar nombre a las cosas.

Todo lo que ambiciona
el verso de los dioses
cuando habla de amor.

OtrOs tiEMPOs

En mis tiempos de niño
contaba todo el día
el beso de mi madre.
Su empeño
en verme ser mayor
y el dejar como herencia
su olor a sombra clara.

Yo era uno más
de aquel patio encendido
por murrias y promesas.
Ese patio sin llaves
que se rendía a la dicha
de tanta mocedad.

Luego llegó el desorden
que jamás entendí:
lo sucio de la muerte
de una mujer tan limpia.

aLinDO La PasiÓn

Alindo la pasión con lo bello,
con el entusiasmo sin historia
y con el encanto que impregna
lo inútil.

También alindo lo encontrado
con lo que no he conseguido:
ser dueño de un lugar imaginado.
Un lugar sin distingos
donde el invierno no tenga color
y donde no se entienda
el oficio de ser Dios o nada.

Aunque queda un refugio
para el que no hay distinción,
y al que se debe volver
cuando sientes que un verso
te dice lo que ignoras.

DiariO DE Las COsas

No habrá otra forma de ver
desde esta habitación donde miro.
Ni palabras con más resignación
que las que beso
antes de condenarlas.

No queda grieta más mordida
por la inseguridad,
ni rincón donde el alba
no haya intentado parar
las horas del reloj.

Hoy fijo mi atención en los sitios
donde intenté juntar un río de labios,
pero no en las bocas que niegan
que el corazón cuando se llena de agua
carece de nostalgia.

Sabe reír
pero se olvida de nombrar la risa.

MaÑana DE sOL

Esta mañana hay sol
y he notado que el día
quiere tratarme bien.

Influye en mi ánimo
mis hortensias podadas
que volverán en flor.
El calor de mi casa
de estar sola,
o la voz de Pessoa
–tantas veces leída–
que abre mi ambición
de vivir simplemente.

Todo está en este día
al que junto mis pasos
con más condescendencia.

Un DÍa MÁs

Un día más
me muevo en la costumbre de estar solo.

Deshabitado
                         como el amanecer,
como el dardo que pide
un corazón nocturno y ciego.
Abierto a la ebriedad
de los instantes
y pleno a la respiración de una caricia.

Un día más
soy el mismo que arropa su costumbre:
la dispersa rutina de mis labios.